Ahora que ya conocemos más sobre el estadio actual, daremos un viaje al pasado para conocer un poco de la historia y solidificación del equipo que conocemos hoy en día.  

Escribe Liliana Sistos en el periódico a.m. (Historia de los estadios en León, 1992): “Los terrenos donde se concentra “La Martinica” eran propiedad de un bohemio del fútbol, Alfonso Guerra, el cual era propietario del Club San Sebastián.

Don Alfonso Guerra tenía fe en su equipo, por lo tanto, edificó sus terrenos haciendo un estadio con tribunas de madera en las que se cobraba 5 centavos, con un cupo para 2 mil personas aproximadamente en el año de 1950.

El equipo San Sebastián inauguró estas instalaciones, y no fue sino hasta el año de 1951 cuando el conjunto “Esmeralda” solicitó la cancha para su entrenamiento. A finales de los años 60, el Club Unión de Curtidores compró el estadio, permitiendo a los “verdiblancos” seguir con sus entrenamientos después de un arreglo económico”.

Añade don José de Jesús Cruz en “Mis memorias del equipo León”: “El estadio “La Martinica” contaba con tribunas laterales de sombra en la parte sur y de sol en la parte norte, sin embargo, en la parte oriente no tenía tribuna de público general sino una exclusiva tribuna de madera para niños no mayores de 12 años”.

Para la temporada 1953-1954 esta tribuna se encontraba en muy malas condiciones, y en un partido León contra Atlas, faltando quince minutos para que iniciara el partido, la tribuna se vino abajo con gran estruendo. Las cosas no pasaron a mayores, sin embargo, los que más daños sufrieron fueron los aficionados.

El antiguo estadio Fernández Martínez fue usado durante un tiempo por las reservas del León que jugaban allí el torneo regional amateur de la zona centro, y en la década de los sesentas fue finalmente demolido para construir en su lugar el moderno Centro Comercial de León, que luego se convertiría en la Plaza del Mariachi.